Una buena manta es imprescindible para pasar lo que queda de invierno, pero cada año parece que hace más frío y en ocasiones debido a la humedad este frío puede llegar a traspasar la protección que nos ofrece la manta si la usamos en la cama. También se puede dar el caso de que tras pasar toda la jornada fuera de casa, al llegar estemos más helados que un congelador y a la hora de acostarnos, la manta no obrará milagros, incluso un buen edredón nordico va a retener nuestro calor corporal pero no aporta calor por sí mismo.
Las mantas térmicas tienen mucha aceptación por motivos obvios: en cuestión de segundos se calientan y aportan ese calor a nuestra cama. La que traemos hoy de la casa Redkey con unas dimensiones de 190 x 150 centímetros, cuenta con dos zonas de calor independientes regulables en tres intensidades desde sus correspondientes mandos de forma que si dormimos acompañados cada cual puede ajustar la temperatura que desee.
Así mismo podemos establecer un temporizador para su desconexión automática en 2, 4 y 12 horas. Su precio en Amazon asciendía a 99,99€ ahora está disponible por 63,99€.
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